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Esta idea de pizza es para introducir más verduras en la comida. La base no es la de una pizza tradicional, lleva huevos y calabaza. Me parece una opción muy buena y saludable. La idea se la ví a ffitcoco durante el confinamiento y me encanto.
INGREDIENTES
Para la base de pizza:
1 huevo
250g calabaza
100g harina de espelta integral
1 cucharada sopera de aceite de oliva virgen extr (aove)
1/2 cucharadita de levadura de panadería en polvo
Sal, ajo, cebolla, pimienta molida (o las especias que más os gusten)
Para los toppings:
1/2 calabacín pequeño
100-150g champiñones
Cebolla caramelizada
80-90g bacon o panceta
Queso azul de hoja
Aceite de oliva virgen extra (aove)
Sal
INSTRUCCIONES
Para la base de pizza:
Cortar la calabaza en dados pequeños, cocinar en el micro durante 5-6 min o hasta que este blandita. Triturar.
Mezclar todos los ingredientes de la base y añadirle las especias que más os gusten.
Precalentar el horno a 180º durante 10 min.
Extender la masa sobre la bandeja con papel de hornear, que quede de un grosor menor a 1 cm.
Hornear durante 20 min hasta que este cocinada pero siga blandita, para introducirla de nuevo con los toppins. Retirar del horno y le damos la vuelta a la masa.
Para los topping:
Preparamos la cebolla caramelizada.
En una sartén marcamos el bacon hasta que empiece a coger color dorado, añadimos los champiñones laminados y salteamos durante 2-4 min.
Cortamos en láminas finas el calabacín.
Colocamos los toppings encima de la base de pizza.
Añadimos un chorrito de aove y sal.
Horneamos 10-15 min más o hasta que la base empiece a estar dorada.